En el inconsciente colectivo, tanto el Sector Metalúrgico como el Diseño Industrial muchas veces se nos representan de modo incompleto: al primero se lo suele ver como un rubro duro, muy ligado a lo ingenieril y a la industria pesada, poco vinculado al diseño; al segundo como una disciplina cuya función es únicamente la de generar un aporte estético en las cosas que nos rodean, es decir, en los productos de consumo masivo. Desde esta perspectiva, parecería compleja la sinergia entre el Sector Metalúrgico y el Diseño Industrial.
Desde ADIMRA creemos que el diseño es una forma de pensamiento que proyecta soluciones a problemas de usuarios. Estos problemas pueden tener distintos orígenes y solucionarse abordando distintos aspectos del problema (no sólo el estético) y se pueden mediante la materialización de objetos, pero también diseñándose conceptos, servicios, estrategias de gestión, de comunicación, de comercialización, etc. El sector metalúrgico es un actor esencial en la matriz productiva del país ya que abastece de los medios de producción, procesos de transformación y piezas y componentes a todo el espectro de la industria nacional. También fabrica productos terminados de consumo masivo para los consumidores finales. Sea cual fuera el carácter del bien metalúrgico, siempre va a haber un usuario involucrado: ya sea un consumidor final o el operario de una máquina; y allí es donde el Diseño Industrial puede insertarse analizando sus problemáticas y brindando soluciones integrales que agreguen valor e identidad a la cadena productiva.
Nuestra misión es trabajar para fortalecer los lazos entre estos dos actores haciendo que el sector tome conocimiento y valorice las ventajas competitivas que el Diseño Industrial puede aportar, y a la vez, elevar el interés y la motivación de los profesionales y estudios de diseño por involucrarse en este rubro.
